Tras el camino intenso preparatorio de la Cuaresma, la Comunidad Parroquial celebra gozosa la presencia del Cristo Resucitado. Los símbolos de la luz, la palabra, el agua y el pan y el vino nos pudieron en contacto con otros tantos aspectos de la vida nueva que el Cristo glorioso nos regalaba. ¡CRISTO HA RESUCITADO! ¡ALELUYA, ALELUYA! ¡FELIZ PASCUA!